- MÚLTIPLES SOLUCIONES: Ahorra energía eludiendo corrientes de aire frío en invierno y calor en verano. Evita la entrada de insectos y polvo por el hueco del bajo de la puerta, tal como la entrada de agua en las puertas que den al exterior.
- DISEÑO: Su cepillo de PVC impide daños y roces en el suelo. Además de esto, tiene una lámina de plástico dentro de la escobilla para una protección plus.
- CALIDAD Y DURABILIDAD: Fabricado con Aluminio y con un fuerte adhesivo que lo realiza muy fuerte e impide deformaciones con el pasar de los años.
- FÁCIL DE INSTALAR: Merced a la tira adhesiva de alta fijación, lograras instalarlo en tan solo 2 minutos sencillamente y sin precisar realizar orificios en las puertas.
- COMPROMISO: Con cerca de diez.000 artículos libres, en AMIG tenemos mucho más de 80 años fabricando y distribuyendo artículos de cerrajería, bricolaje, ferretería, herrajes, jardinería, menaje y hogar, electricidad, línea profesional y protección y seguridad laboral. Todos de la mucho más alta definición y confiabilidad.
Ojo en demasía de riego
Para tener un bonsái de ficus hay que tener en consideración tres cosas básicas de todas y cada una de las plantas: la luz, el agua y los nutrientes. Asimismo hay que comprender que no debemos regar bastante. No ha de estar de forma permanente en un espacio de interior. Tampoco puede mantenerse considerable suma de tiempo al sol en tanto que las macetas tienden a ser pequeñas y esto comporta que tenga escasas reservas.
El instructor asimismo apunta que si deseas que tu bonsái dure un buen tiempo no puedes dejar que solo una raíz o solo una rama domine al resto. Añade, que entre los fallos mucho más usuales es tener pena o lástima para recortar las ramas, pero que se debe tener precaución con la manera del árbol y hacer un equilibrio en las ramas.
Provecho en confinamiento
“El arte del bonsái tiene indudablemente un encontronazo increíblemente positivo en estos momentos, puesto que fué muy saludable y relajando la sensación de tener un pedazo de naturaleza en el hogar . Además de esto, he mantenido mi cabeza ocupada, aprendiendo, estudiando y aprendiendo de ese planeta infinito”, asegura Lisette González, de 32 años, trabajadora por cuenta propia.
“¡Y las acciones virtuales de nuestro club, fueron el más destacable, un espacio de conocimiento puro, pero asimismo de risas, de amigos y de increibles personas!”, añade.