En la técnica bonsáis, la plantación en roca o plantación prehistórico es una de las maneras mucho más populares entre los apasionados, en tanto que da la oportunidad de crear panoramas en miniatura. La planta se fija a una roca utilizando las cavidades que muestra la piedra y sus raíces se desarrollan en la masa pétrea. Las raíces descubiertas se asocian a los bonsáis mucho más viejos, lo que resulta en especial reconfortante para todos los que dedican horas a esta afición.
De qué forma realizar un bonsái sobre roca
Comenzamos fijando la roca en la maceta, para eludir que se desplace. Extraemos el bonsái de su maceta y lo ubicamos sobre esta roca de la manera mucho más creativa y natural viable anclando a través de sujeciones de las raíces a la roca (alambre, hilo de cuerda o rafia nos tienen la posibilidad de ser útil).
Si las raíces son muy gruesas y para eludir fregadoras con las aristas afiladas de la piedra tenemos la posibilidad de poner un pequeño acolchado de musgo esfagno entre las dos para un mejor taburete de exactamente las mismas.
Los bonsáis son una manera de arte, pero no son muy productivos gracias a su tamaño.
Un bonsái de carambola. (Fotografía: Fotografías de depósito para HUY THOAI/Shutterstock)
Un manzano bonsái. (Fotografía: Fotografías de depósito para WALTER PALL/Shutterstock)
Mezclas de sustratos
Conociendo las clases de tierra, con sus pros y sus contras, el aficionado termina realizando sus mezclas en armonía con la manera de riego o el sitio donde habitan los bonsáis. Una aceptable mezcla de sustratos para bonsáis en la mayoría de los casos está formada por el 70% de Akadama y un 30% de grava o piedra volcánica.
Pero en la situacion de apasionados recién iniciados y con no mucha experiencia en el momento de abonar o llevar un óptimo riego, lo idóneo es usar mezclas preparadas que contengan turba, Akadama y grava volcánica. En un caso así, el sustrato Terrabonsai sería el especial.
Ciertas especies tienen requerimientos concretos en lo que se refiere a la mezcla de sustratos. en la situacion de los juniperos y pinos, precisan mezclas así como: 60% de akadama y 40% de volcánica, grava o kyriuzuna. Por otro lado, las azaleas, las camelias, las gardenias y los cítricos precisan un óptimo porcentaje de turba o Kanuma sola. Los árboles de secano, como olivos, romeros, etcétera. eligen suelos drenantes pero agradecen asimismo algo de materia orgánica.
Métodos alternos de plantación en roca
Otra opción alternativa para localizar el mismo efecto a la construída antes sería sepultar roca y árbol en una maceta profunda y asimismo ir conociendo la roca de poco en sucesivos trasplante, reduciendo el tamaño de los tests, hasta el día de hoy en que alcanzara la situación deseada.
Otro trámite libre y que crea resultados fenomenales es la utilización de keto para contemplar raíces, sugiriendo el efecto que el árbol aparece de nuestra roca. El keto es un sustrato con alta aptitud de retención de humedad y que se compone fundamentalmente de arcilla tipo akadama de grano fino o en polvo, turba negra y opcionalmente algún agrutinante desde alga o musgo.